Mis queridos amigos y amigas:
Nos estamos acercando, nuevamente, a la gran Fiesta de la Navidad, fecha de mi nacimiento en Belén, en realidad : el día de mi cumpleaños. Recuerdo que el año pasado Uds. celebraron la Navidad en mi honor por todo lo alto. En sus hogares se gastó dinero “a lo loco”: regalos, muchos regalos, a cual más caro, suntuosas comidas, y bebidas, sobre todo bebidas, desde refrescantes cervezas hasta los “wisquis” de los más caros.
Me temo que este año pase algo parecido. Veo anuncios luminosos por todos los lados. La televisión sigue bombardeando, con su publicidad machacona para convencer que lo importante es comprar, gastar y malgastar…. Las luces fosforescentes se encienden y se apagan, rítmicamente, como queriendo encandilar a la gente.
Francamente, yo estoy un tanto desconcertado: Se habla de crisis económica, de desempleo, de extrema pobreza…pero cada año aumenta el derroche.
Sin embargo, no era eso lo más importante que yo quería decirles en esta carta confidencial.. Deseo hacerles confidentes de algo que me desconcierta y hasta me entristece….A veces se me ocurre pesar que la inmensa mayoría de los cristianos que celebran la Navidad con tantos gastos, ni siquiera saben lo que están celebrando.
El año pasado esperé, con impaciencia y con cierta ilusión, que me invitasen a algunas de esas cenas suculentas, alegradas con la canción “Noche de Paz, Noche de Amor,” como música de fondo… pero NADA, se olvidaron totalmente de mi. Nadie me invitó !!!
¿No les parece extraño, queridos amigos y amigas, que el homenajeado de la fiesta no sea invitado a su propia fiesta …? ¡Es el colmo de la indelicadeza y de falta total de urbanidad!!!!
Además, pude ver, con cierta tristeza, que todos, absolutamente todos, recibían sus lindos regalos y para mi NADA!!!
Lo extraño es que un niño, muy despierto y espabilado me dijo, todo serio: “Es que Tú eres distinto. Tú no necesitas regalos. Todo el mundo es tuyo ¿cómo te vamos a hacer regalos a ti….?
Y YO, sabiendo que hablaba con sinceridad, le dije muy amablemente:
-“Querido amiguito ¿nunca has oído aquella frase del Evangelio: “Lo que Uds. hacen con los más pobres, conmigo lo hacen” . Todo lo que regales a un pobre es como si me lo regalases a mi-….”?
El niño me miró y con una sonrisa quiso comunicarme que había entendido perfectamente mi mensaje:
“Navidad es compartir. Navidad es paz, es solidaridad, es amor… Navidad es la misericordia, la ternura de Dios hechas humanidad…. Mis queridos amiguitos y amiguitas, este es el mensaje que yo le quiero dar al mundo en esta Navidad. Grávenlo bien en sus corazones : “DONDE QUIERA QUE HAYA AMOR, ES NAVIDAD”.
Navidad 2010
Firmado: Jesús de Belén
¡ FELIZ NAVIDAD!